GMU y Junta enfrentadas por las atarazanas

GMU y Junta enfrentadas por las atarazanas

La verdad que esta desición afecta a todos los que trabajamos en la hosteleria, entre los que me incluyo. Pues pensando en lo mala que está la cosa, teníamos una luz esperanzadora con el proyecto.  Pensabamos que al final del tunel siempre hay luz en el centro de Sevilla, pero en esta ocasión ha sido que no.

Ya soñabamos con mesas de trabajadores comiendo menús en la calle Arfe, posteriormente con clientes tapeando en los bares y asistiendo a shows flamencos del Arenal, en fín una serie de expectativas que se han desvanecido de la noche a la mañana, así que seguiremos paliando la crisis como podamos y os dejo este artículo que me ha parecido ejemplarizante.

Todavía no se había manifestado sobre el problema, pero ayer lo hizo mediante un comunicado. El delegado de Urbanismo, Maximiliano Vílchez, usó ayer argumentos técnicos para intentar contrarrestar la ofensiva socialista por el traslado del proyecto del Caixafórum de las Atarazanas a la Torre Pelli. "La Junta de Andalucía ha ocultado el proyecto Caixafórum en las Atarazanas a pesar de que el PGOU obliga a publicitarlo debido a la máxima protección del edificio ubicado en el Arenal, por lo que el proyecto no cumplía dicho requisito obligatorio, impidiendo a la ciudad conocerlo y a hacer las alegaciones oportunas".

Vílchez volvió ayer a incidir en que la obligación de realizar un plan especial para el proyecto, una cuestión que ha provocado en los últimos meses un arduo debate público y que ha sido uno de los factores fundamentales para el retraso en el inicio de las obras y, ahora, su definitiva suspensión. "La normativa del PGOU obliga a presentar un plan especial, dado que el edificio tiene la máxima protección, y que ese plan conlleva la publicidad del proyecto". Según Vílchez, la no elaboración de este plan especial se ha debido a las intenciones oscurantistas de la Junta, "que no ha querido que Sevilla conociera el proyecto e hiciera alegaciones, por lo que el consejero Alonso tendrá que explicar por qué han ocultado el proyecto de las Atarazanas impidiendo que se hiciera publicidad del mismo".

Vílchez se atrevió ayer a criticar por primera vez el proyecto realizado por Guillermo Vázquez Consuegra y afirmó que "las explicaciones las tiene que dar la Junta de Andalucía, que fue quien pactó que Caixafórum se ubicara en las Atarazanas y quien eligió el proyecto arquitectónico, que contemplaba un restaurante y un auditorio de más de 2.000 metros cuadrados en el techo de un edificio de más de 800 años de antigüedad". En ningún momento, el comunicado remitido a esta redacción por el delegado de Urbanismo contempla alguna responsabilidad por parte de La Caixa, entidad que a la que la Junta cedió las Atarazanas por 75 años para construir el Caixafórum.

"El cumplimiento de la Ley urbanística es un requisito esencial del gobierno de Zoido, a diferencia del gobierno anterior y de la Junta, para quienes el cumplimiento de la ley no importa", afirma Maximiliano Vílchez, quien añade que "Zoido no quiere que Sevilla esté cuestionada internacionalmente por sus proyectos urbanísticos y tampoco quiere que las inversiones acaben en los tribunales y con una orden de demolición", en referencia a la biblioteca del Prado, otro de los planes envenenadosheredados del Ayuntamiento socialista anterior.

Vílchez sigue la misma línea de Zoido de descargar a la entidad catalana de cualquier responsabilidad en el fiasco y afirma "respetar" su decisión "y agradece que traigan a Sevilla un espacio tan importante para la cultura". Finalmente señala que "Alonso debe estar ya trabajando en un plan de uso y conservación para las Atarazanas, con el que colaboraremos pero siempre respetando la legalidad".