Feria de San Miguel en Sevilla (Curiosidades del siglo XX)
Para comenzar a hablar de la feria de San Miguel, tenemos que remontarnos a tiempos muy pasados, tan pasados como mediados del siglo XIII, cuando el rey sabio, Alfonso X, concedió a la ciudad de Sevilla la potestad de celebrar dos ferias, una en primavera y otra en otoño. Su finalidad no era otra que promover la compra y venta de productos agropecuarios en la comarca. Gracias al Rey sabio los sevillanos, tuvimos la posibilidad, años mas tarde, de tener corridas de toros en La Maestranza, dentro de una feria denominada, de San Miguel, que ha pasado por diferentes avatares a lo largo del tiempo, en lo taurino, y realmente agotada en su espíritu inicial. ¡Verdaderamente sorprendente!
Este origen remoto de los mercados sevillanos se difumina con el tiempo y no aparecen con nombre y apellidos, hasta 1846, en que Ybarra y Bonaplata fundan la Feria de Abril. Años más tarde, en 1875, el Ayuntamiento, para suplir la falta de carácter mercantil de la primera, crea la Feria de San Miguel, con exclusivo espíritu ganadero, fijando los días 28, 29 y 30 de Septiembre, para la celebración del certamen. El evento comenzó a celebrarse en El Prado de San Sebastián, mas tarde se traslado a Tabladilla, y por ultimo a Los Remedios. Poco a poco se comienzan a construir casetas y a darle carácter lúdico a la feria, hasta que en los años 40 se prohíbe el contenido festivo y el certamen comienza a decaer hasta desaparecer totalmente en 1970.
Los festejos taurinos que comenzaron a celebrarse el mismo año de la creación de la feria, han seguido su curso hasta nuestros días, interrumpiéndose solo, en los años de 1936 y 1937, con motivo de la contienda nacional.
La plaza de toros de la Real Maestranza, a lo largo de estas 138 de ferias de San Miguel, ha vivido hechos históricos que han marcado la historia de la Tauromaquia, valgan ejemplos de ellos, la alternativa de ese monstruo del toreo que fue José Gómez Ortega "Gallito", el 28 de Septiembre de 1912, con una corrida de Moreno Santamaría, de manos de su hermano Rafael. Tres años más tarde, es también José, el que protagoniza otro acontecimiento histórico al cortar la primera oreja que se concede en La Maestranza, en una tarde en la que el hijo de Gabriela Ortega, actúa como único espada.
El siglo va avanzando, y en 1918 se da una curiosa circunstancia: la Feria de San Miguel se celebra, taurinamente, por partida doble ya que Sevilla cuenta con otra plaza de toros, construida en el barrio de San Bernardo bajo los auspicios de Gallito. La plaza Monumental, con capacidad para 23.000 espectadores, compartió corridas con La Maestranza hasta el 29 de Septiembre de 1920, en que se celebró el ultimo festejo, actuando en él, Granero, que había tomado la alternativa el día anterior en la Real Maestranza hispalense.
El otoño de 1927, fue testigo de un hecho insólito que hizo temblar los cimientos de La Maestranza sevillana, Juan Belmonte, "El Pasmo de Triana" se entretuvo aquella tarde del 29 de Septiembre, en cortar, el solito, cuatro orejas, dos rabos y una pata. El mismo dia, pero de 1958, se produce otra alternativa de postín en San Miguel, fue la del diestro sevillano, Diego Puerta, al que Luís Miguel Dominguin le cedió el toro "Zambombero" de la ganadería de Arellano.
Junto a estas grandes actuaciones de figurones del toreo, sorprende no ver anunciado, a lo largo de las diferentes ferias otoñales de Sevilla, a Manuel Rodríguez "Manolete", que jamás hizo el paseíllo en ninguna sanmiguelada.
Otro suceso curioso tuvo lugar en la feria de 1984: las dos corridas que por entonces se daban, hubieron de celebrase el mismo dia, motivado por el entierro del malogrado Paquirri, cosechando Pepe Luís Vázquez Silva, un extraordinario triunfo en la celebrada por la mañana.
Nos vamos acercando al final de siglo XX, y el 1 de Octubre de 1995, Sevilla y los sevillanos pudimos paladear el toreo pausado, puro y afiligranado de Emilio Muñoz, que salió, a hombros, por la Puerta del Príncipe de la Real Maestranza. El trianero y los aficionados hispalenses ya habíamos disfrutado de esa experiencia el año anterior, el 21 de Abril de 1994, cuando le vimos salir en volandas, por primera vez, por esa mítica Puerta del Príncipe.
En San Miguel de 1999, el mismo dia en que se produce la retirada de los ruedos de Miguel Báez "Litri", en la plaza sevillana, Enrique Ponce triunfa a lo grande, saliendo por la puerta más importante del toreo.
Y llegamos a la última Feria de San Miguel del siglo XX, una Feria que se recuerda de forma muy especial. En este año del 2000, los sevillanos están deseando que llegue la sanmiguelada, pues para el 23 de Septiembre, con ganado de La Dehesilla, están anunciados, nada más y nada menos, que Curro Romero, Manzanares, que se despide de los toros, y Morante de la Puebla. Pero unas "astifinas enfermedades" avaladas por los preceptivos partes médicos, hace que se caigan del cartel. El primero en sentirse "mal" fue Manzanares, a las pocas horas Morante le sigue, y por ultimo Curro también sufrió el misterioso "contagio", por lo que los aficionados y la empresa sufrieron una tremenda decepción. Fue el principio del fin para que Curro decidiera anunciar su despedida un mes mas tarde.
Para este año, en que la temporada ha estado marcada en Sevilla por la disminución del número de festejos, la feria toma tintes de verdadera importancia, con unos carteles que a buen seguro movilizaran a los aficionados, y que comienzan el viernes 27, con un atractivo mano a mano entre dos jóvenes matadores de cortes bien diferentes, como son Antonio Nazaré y Jiménez Forte, que lidiaran una corrida de José Luís Pereda. El sábado 28, con ganado de Hnos. García Jiménez, harán el paseíllo en el coso baratillero, Manuel Jesús El Cid, Sebastián Castella y Miguel Ángel Perera, y para rematar este mini ciclo ferial, el domingo 29, uno de los carteles más atractivos que se pueda dar en la actualidad, toros de Juan Pedro Domecq para Morante de la Puebla, El Juli y Alejandro Talavante.
Que veamos una buena Feria de San Miguel, en Sevilla y que Dios reparta suerte.
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